miércoles, 7 de octubre de 2015

Héroes de nuestro tiempo: Capítulo 1 Los trabajadores de Air France

Estos son los verdaderos héroes de nuestro tiempo, los trabajadores que dicen "hasta aquí hemos llegado" a la cúpula directiva, en este caso los trabajadores de Air France. Una compañía que pese a cerrar los balances con enormes beneficios (posiblemente hayan intentado trucar el balance pero cuando ganas mucho es realmente difícil hacerlo sin que te pillen), ha programado despidos masivos de casi 2000 trabajadores. Es increíble que utilicen como excusa de que, como presuntamente no han sido capaces de trucar los balances, han ganado mucho por la bajada del coste del combustible y porque en verano han usado mucho sus líneas y que en realidad su empresa pierde dinero. ¿En serio estas personas pasaron la educación primaria?

Defienden que hay que aumentar la productividad y rentabilidad (¡las palabras de moda!), sabéis que para aumentar la productividad y la rentabilidad lo primero que hay que hacer es contratar a personas competentes (algo imposible si cuentas con RRHH ya que son incapaces de contratar a alguien competente y porque representan un enorme gasto para la compañía, por lo que el mero hecho de que RRHH exista en la empresa es sinónimo de restar en productividad y rentabilidad). Tampoco está justificado echar a trabajadores para que los de la cúpula directiva sigan cobrando millonadas que alcanzan las cotas pornográficas. Parece que los trabajadores de Air France deben pensar parecido ya que irrumpieron en la sala de reuniones y rodearon al director de RRHH para ajustar cuentas.


Fotografía extraída del Huffingtonpost, el descamisado es el director de RRHH (quien en los últimos 3 años ya había eliminado 9000 puestos de trabajo).


Moraleja: Directivos, bajad vuestro sueldo y trabajad algo, porque sois vosotros los principales responsables de la no rentabilidad de la empresa y de la no productividad. Basta de salarios pornográficos, de exigir a los de abajo que trabajen más horas cobrando lo mismo, basta de tanta hipocresía y de tantos ceros.


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